Conocí a un director financiero que siempre me repetía, los gastos son como tu madre , los ingresos como tu padre, de los primeros puedes estar seguro…
es posible que caigas en la tentación de inventarte una promoción. Lo has oído decir y lo has leído: no hay como un buen descuento o añadir valor al producto (o servicio) para que el mercado se despierte y responda.
Pero ojo, no caigas en la trampa!
¿Qué quiero decirte con esto? Pues simplemente, que muchas veces no es oro todo lo que reluce
si vas a generar ventas a coste de reducir tu margen comercial debes estar muy seguro de que el volumen de ventas que conseguirás va a ser suficiente para compensarlo.
Por eso te digo ten cuidado, no vaya a ser que tú mismo te metas en la boca del lobo y tu fantástica idea se convierta realmente en una trampa para tu cuenta de resultados.
Dicho de forma muy simple, si te urge tener liquidez probablemente estás de acuerdo con renunciar a mucho o todo el beneficio. Se trata de salvar tu tesorería…
una cosa es activar las ventas para tener liquidez y otra muy distinta conseguir rentabilidad.